En este artículo analizaré las diferentes tácticas utilizadas por el atleta David Rudisha en las carreras de 800m. David Rudisha pertenece al tipo de atletas tácticos polivalentes, ya que además de imponer su ritmo de carrera yendo en cabeza, busca la aceleración final para ganar el sprint.
Analizados diversos vídeos de sus carreras he observado que su técnica varía de carrera a carrera, pero predominando unas lineas generales.
En una primera época podemos observar como su táctica consistía en marcar un ritmo de carrera muy rápido en la primera vuelta controlando la carrera en las dos vueltas centrales y volviendo a marcar un alto ritmo en la última vuelta culminando con un sprint frenético en los últimos 100 metros.
Durante esas dos vueltas centrales su táctica variaba dependiendo de sus oponentes, llegando a ralentizar el ritmo para luego dejarlos atrás en la última vuelta, como tirando a un ritmo alto y acabar derrotándolos con un último esfuerzo.
La culminación de esta táctica fue la final de los juegos olímpicos de Londres 2012 y sus famosos 100 segundos.
Consciente de hallarse en un gran momento, decidió romper todos los cánones de prudencia y serenidad en la final. Corrió en cabeza desde el primer apoyo hasta el último, a un ritmo infernal dejando irremediablemente atrás a todos y cada uno de sus rivales. Estos fueron sus tiempos de paso:
- 200: 23'4
- 400: 49`28
- 600: 1.14.30
- 800: 1.40.91
Como podemos observar, realizó un brutal esfuerzo en el primer tramo que fue prácticamente un sprint (23`4), que pagó en el último tramo (26`6), pero ya con el oro en el bolsillo, la clave, ese paso por los 600 a 1.14.30.
Tres años después la situación fue completamente distinta, ya que una lesión de rodilla lo dejaría tocado mucho tiempo impidiéndole revalidar su título mundial en 2013. Tras perder diversas competiciones en 2014, Rudisha tuvo que reconfigurar su táctica ya que tirar a un ritmo frénético parecía no surtir el mismo efecto que pocos años atrás, y oponentes parecían preparados para todo lo que pudiese echarles. Como más tarde reconoció ante un grupo de periodistas sus rivales aprendieron a calcular su velocidad y a actuar en consecuencia. Así que tomó medidas al respecto.
¿Y cómo lo hizo? Pues exactamente de esta manera:
- 200: 25`06
- 400: 54`17
- 600: 1.21.50
- 800: 1.45.84
De manera diametralmente opuesta a los juegos de Londres, en los Mundiales de Pekín ha actuado con mucha prudencia, midiendo bien a sus rivales en vez de que ellos lo midiesen a él, y recogiendo los frutos de su cambio de táctica tanto en Pekín como en los recientes juegos de Rio 2016.
No solo ha sido capaz de adaptar la táctica si no que también se ha adaptado a la nueva situación él mismo, y a mi entender aún no lo hemos visto todo de este gran atleta, que seguirá adaptando su táctica conforme le siga haciendo falta.
Alberto Fernández.
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